La Plaza Las Américas se transformó en un verdadero punto de encuentro comunitario con música, talleres, astronomía y un cierre multitudinario al ritmo tropical de Amerika’n Sound.
Peñablanca vivió este fin de semana una jornada histórica al celebrar su 165° aniversario, un evento que reunió a miles de vecinos en la Plaza Las Américas y que se transformó en una verdadera fiesta familiar. Desde temprano, el espacio público se llenó de padres, abuelos, jóvenes y niños que recorrieron los stands de emprendedores, artesanos y food trucks, disfrutando de un ambiente seguro y pensado para que las familias permanecieran durante todo el día.

La programación comenzó con concursos y juegos animados por el DJ Boombaak, seguidos de un bloque deportivo con baile entretenido que puso a mover a grandes y chicos. Más tarde, la Oficina Municipal de la Juventud organizó talleres abiertos, mientras que el Bloque Infantil atrajo la atención con las presentaciones de las Guerreras del K-Pop y la Escuela de Talento Joven, actividades que generaron entusiasmo entre los más pequeños y sus familias.
En el sector de emprendimiento, los asistentes pudieron conocer productos locales. Eduardo Parra, representante de Fresa Moda y Accesorios, destacó: “Nosotros vendemos artículos de vestuario femenino, juguetería para niños y accesorios de moda. Esta instancia es excelente, no solo por poder compartir con las familias, sino porque ayuda a la comunidad, a contribuir a la seguridad y a conocernos. Yo soy de acá, de Peñablanca, y que esto se realice en mi sector es de mucho agrado porque aprovecho de compartir con la gente que uno ve a diario”.

Uno de los espacios más concurridos fue el de la Corporación de Astronomía del Marga Marga, que instaló telescopios para observación solar. Claudio Quesada, encargado técnico de la agrupación, señaló: “Hoy trajimos equipos para observar el sol y ha sido muy gratificante ver el interés de los niños. Muchos están mirando a través de un telescopio por primera vez. Este tipo de eventos familiares nos permite llegar directamente a la comunidad y motivar a quienes quieran aprender más sobre astronomía”.
La comunidad también expresó su gratitud por la celebración. Elizabeth Barria, vecina del sector, comentó: “Esta actividad está linda, tranquila, ordenada y pensada para que la familia venga a disfrutar. Estoy muy agradecida de que Peñablanca sea tomada en cuenta y además con un evento de primer nivel. Muchas veces sentimos que Peñablanca quedaba al margen, pero esto demuestra que sí somos importantes”.
Durante la tarde, el escenario recibió a Dideco’s Band y al bloque de Talento Local, que reunió a artistas como Ismael Cantante, Charro Pablo Chiguay y Meirri. Además, se realizó la distinción a la Ciudadana Destacada Nadia Morales Vásquez y la tradicional elección de la Reina de Peñablanca, María Verónica Méndez Reveco.

El momento más esperado llegó con el show de Amerika’n Sound, que hizo cantar y bailar a grandes y chicos con sus éxitos tropicales. Ariel Marín, director de la banda, expresó: “Lo pasamos increíble, el público impresionante, cantó todas las canciones, pidieron otra. El público era muy transversal, somos un grupo que traspasa generaciones pero vimos abuelitos, niños”.
El alcalde Nelson Estay también destacó la masiva concurrencia y el ambiente familiar: “Acá hay familias completas, desde los abuelos, papás, hijos, nietos, disfrutando. Cuando uno ve la sonrisa de un niño, de un papá o un abuelo, uno queda pagado. Estas actividades son las que le dan vida a la ciudad. Los 165 años de Peñablanca hay que celebrarlos como corresponde. Villa Alemana hoy es una ciudad viva, donde la familia puede disfrutar de forma tranquila, con seguridad y espacios para todos”.

Por su parte, Hernán Zumarán Román, presidente de la Agrupación de Organizaciones Sociales y Comunitarias de Peñablanca, manifestó: “Estamos muy contentos por la forma en que se está celebrando un aniversario más de nuestra localidad. No me canso de agradecer a las autoridades que han creído en nosotros. Lo que más destaca es el corte familiar que se le ha dado a la celebración”.

De esta manera, Peñablanca celebró sus 165 años con una actividad masiva, ordenada y profundamente comunitaria, donde la música, la participación de los vecinos y la presencia de niños y padres fortalecieron la identidad del sector.
